Este año, el evento dió un giro especial a su formato. Gracias a la organización altruista del Real Club Marítimo de Barcelona (RCMB), con la colaboración de Veles per l’Alzheimer, los participantes pudieron disfrutar de la experiencia a bordo de dos embarcaciones emblemáticas: el gran catamarán TURTUR SPACE, que reunió a usuarios de distintos centros y asociaciones como ACE, AFAB y Aires, y el IMOCA Escuela de la Fundació Barcelona Capital Náutica, cedido para la ocasión y que acogió a un grupo propio.
Durante dos horas, el mar se convirtió en escenario de sonrisas, conversaciones y nuevos vínculos. Una experiencia inolvidable que los participantes ya esperan volver a repetir.
Desde Veles per l’Alzheimer se quiere agradecer profundo a:
- Al RCMB, por su compromiso y generosidad al organizar y acompañar siempre el proyecto.
- A TURTUR Experience, por ofrecer la oportunidad de navegar en un catamarán único que permitió unir a personas de distintos centros en un mismo espacio.
A la Fundació Barcelona Capital Nàutica, primer socio de esta singladura, por poner siempre sus embarcaciones a nuestro servicio de manera desinteresada.
- Y a CaixaBanc, cuyo apoyo económico hace posible que cientos de personas puedan encontrar en la navegación a vela un espacio de paz, bienestar y calidad de vida.
La Regata por el Alzheimer demuestra, una vez más, que el mar es mucho más que un horizonte: es un lugar donde compartir, recordar y crear momentos que permanecen en el corazón.